Rosario3.com, Jueves 19 de Julio de 2018
Taller de lecturas infantiles prohibidas en la última dictadura
Los libros ya no muerden. ¿Hay algo que no te dejen imaginar? es la actividad lúdico creativa destinada a niñas y niños de 4 a 11 años que se desarrolla este viernes a las 15, en el Museo de la Memoria. Gratis, con cupo limitado
“Lo que se plantea es la prohibición desde el Estado y pensar, entre todos, por qué no se quiso que accedamos a eso”, (@museo_memoria)
Este viernes a las 15, en el Museo de la Memoria, Córdoba 2019, se desarrolla Los libros ya no muerden. ¿Hay algo que no te dejen imaginar?, un taller lúdico creativo destinado a niños y niñas de entre 4 y 11 años. El mismo se organiza a partir de libros de literatura infantil censurados en la última dictadura cívico-militar.
La actividad es gratuita, con capacidad limitada, y se respeta el orden de llegada.
“La idea de la prohibición, de eso que no se puede hacer, la tenemos desde pequeños. El trabajo es a partir de lo que es la prohibición de un derecho y si alguien tiene derecho a quitarnos la posibilidad de decir lo que queremos o de imaginarlo”, explicó la actriz y docente Maria Luisa Sánchez, coordinadora de la actividad junto a la historiadora Savrina Vargas, en diálogo con Rosario3.com.
Durante la actividad, las niñas y los niños que participen son organizados en dos grupos.
Para el primero –de los 4 a los 6 años–, el taller contempla “un plan de actividad plástica en la que trabajamos eso que nunca nos puede faltar que la posibilidad de imaginar, que ese deseo no se vea coartado”.
La misma intención orienta el trabajo del segundo grupo – a partir de los 6 años– aunque aquí la actividad consisten en crear una historieta con los personajes y las historias de los relatos compartidos.
La prohibición como tal es un concepto que manejan ambos grupos y las posibilidades de trabajo están relacionadas con las capacidades desarrolladas a partir del ingreso al ámbito escolar.
“Lo que se plantea es la prohibición desde el Estado y pensar, entre todos, por qué no se quiso que accedamos a eso”, continuó Sánchez.
Al ser consultada sobre las narraciones elegidas, la también productora teatral explicó que eligieron “textos puntuales” más que avanzar sobre escritores que fueron censurados durante la dictadura.
Algunos de los títulos que la entrevistada enumeró son “Cinco dedos”, del Colectivo Libros para Niños de Berlín (1975), “Un elefante ocupa mucho espacio”, de Elsa Bornemann; y “El pueblo que no quería ser gris” (1975), de Beatriz Doumerc.